Dice la RAE en la cuarta acepción de la palabra perla que se trata de una cosa preciosa o exquisita en su clase, mientras que en la primera, la que refiere las esferas nacaradas, termina afirmando que se estima mucho en joyería cuando tiene buen oriente (brillo). Durante muchos siglos, los buscadores de perlas se aventuraron a perderse en medio del océano para dar con estos tesoros remotos y extraerlos de sus conchas, y probablemente ni su ánimo de lucro les impediría quedar prendados de su belleza.
Desde hypérbole.es hemos confeccionado la lista musical llamada Perlas, que trata de acercar a nuestros lectores (ahora también oyentes) algunos exponentes en forma de canciones, sin mayor afán que el de difundirlas. El nombre de la lista alude a dos de las características de estas gemas: su brillo y su origen. Todas ellas son valiosísimas piezas, que provienen en algunos casos de rincones olvidados o poco accesibles de la música, y en otros de facetas desconocidas de autores conocidos. Con ellas pretendemos que quienes las escuchen las conozcan, las disfruten y queden embelesados con ellas como quienes hemos salido a cazarlas en los confines del vasto mar de la música. Poco a poco iremos añadiendo más perlas a esta colección preciosa, exquisita y con clase.
