La hamaca
porEs una verdad universalmente conocida que en todas las casas existe una jerga con la que rápidamente sus miembros se entienden. En La casa,…
Es una verdad universalmente conocida que en todas las casas existe una jerga con la que rápidamente sus miembros se entienden. En La casa,…
Es como si una quisiera solo escribir en lugares bonitos. Cuando el sol calienta suave porque es otoño. Cuando el mar se mece sin…
Contesto a la tuya con esta, ni tan tierna ni tan bonita, pero sí mía después de todo. También yo ando quejoso de moquero…
La casa familiar está encima del mar. De las que ya no se construyen hoy en día porque está prohibido. La casa familiar es…
En Croacia el mar no tiene olas. Las quitó Dios, se marcharon ellas. Quién sabe. Lo hicieron cuando los croatas terminaron sus pueblos. Quedaron…
Diario de un Savonarola
Escribo siempre sola. Y, a menudo, de noche. Llevo un par de días sintiéndome angustiada. Esa presión en el estómago. Mentiría si dijese que…
A veces, la soledad entra en mi casa cuando tú estás. Me despierto temprano, cuando el sol está saliendo y, como en un cuadro…
Querido amigo de infancia, sé que piensas que Diyala te mostró lo que es el mundo con la mano de tu amigo en tu…
Existen momentos que demandan, que piden a gritos que dejes lo que estés haciendo. Que escuches, que sientas. La llamada. ¿De quién? Tal vez…
¿Y si escribo en el balcón? Por fin ahora sopla una brizna de aire que disipa, solo un poco, este bochorno de agosto. Se escucha entrechocar de cubiertos y platos, rumores de conversaciones y el grifo de la pica de la vecina de en frente, que enjuaga los cacharros. A lo lejos, sirenas –porque en la ciudad suenan siempre–. Y música,…
Escribo por las cicatrices. Las de la piel y las del alma. Por los cortes que dibujan, que trazan, que insinúan nuestras líneas; que…