Un café con Marianne

Hacía calor. El sol abrasador de mediados de agosto le humedecía la camiseta por la espalda y debajo de los pechos. Abrió la puerta…

Amores para Maricela

Maricela se despertó aquella mañana con la sensación de que por fin había pasado todo. Lo había conseguido. Ya podía despedirse de aquel apartamento…

Brígida

Nunca me gustó el verano. No por el calor sofocante del pueblo durante más de nueve meses, a eso ya estaba acostumbrada. Tampoco por los insistentes mosquitos…