El camino ascendente de Arctic Monkeys
porRecuerdo que en el año 2006 gran parte de bandas y solistas imprescindibles de la historia de rock eran aún para mí sólo nombres…
Actualidad
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Los «Tiempos modernos» de Fernando Poblet
porEs curioso como funciona el azar. Yo estaba por ahí, leyendo cosas en casa una mañana de sábado y de pronto algo me recordó…
¡Abajo ‘las caenas’! (Englishman in Madrid)
por«Patriotism is usually stronger than class hatred, and always stronger than internationalism Nationalism is power hunger tempered by self-deception» George Orwell …
Divagaciones sobre el maquinista
porNo sé cómo me sorprendo, pero lo hago cuando veo la foto, su cara ensangrentada y la camisa azul pálido, en la primera página de…
¿Y si muero a los 51? (Tributo a James Gandolfini)
porAyer –da igual qué ayer- conocimos la noticia de la muerte del gran James Gandolfini. Murió en Roma. De un infarto. Tenía 51 años….
Aristocles IV: ¡Fuga de Siracusa!
porPara Israel S., guerrero del conocimiento… Aislado de mi gente en lo que parece ser una villa de recreo en Siracusa, Sicilia, las noticias …
El Discurso del Método en los tiempos de Wert
porLes miro con cierta lástima, con condescendencia. Son una buena clase, son alumnos aplicados e inteligentes pero sé que aún no están listos…
‘Fútboldesconexión’
porAún lo recuerdo. Sentada delante del televisor, con 6 o 7 años, me preguntaba cuál era el motivo que movía a 22 tipos a…
El blues del vidrio azul
porHoy, día de San Valentín, me siento ante mi ordenador tratando de criticar el exceso de color rojo que domina en la hiperdosis…
‘Amour’, de Haneke
por¿Qué piensa Emmanuele Riva en esa espléndida fotografía de su juventud? ¿ Qué busca con esa mirada de diosa, qué recuerda, a quién espera…
Arquitectura prefabricada: un futuro posible
porLe Corbusier, en su libro Hacia una arquitectura, planteaba ya la cuestión de si una casa debería poder comprarse como se compra un automóvil,…
Todavía y siempre
porTodavía y siempre son dos palabras de amor, que hoy deseamos compartir con vosotros Machado y yo: ¡Que entre vuestra vida y la mía…